Estoy de acuerdo con la declaración de que venimos a #equilibrar y no a #juzgar nuestras acciones. Cuando juzgamos a los demás, estamos #proyectando nuestros propios #miedos y #inseguridades sobre ellos. Esto solo crea más #separación y #conflicto. Cuando, en cambio, nos enfocamos en #equilibrar nuestras #propias acciones, estamos creando un mundo más armonioso y pacífico.
También estoy de acuerdo con la declaración de que antes de #condenar debemos pensar en nuestra #autoridad para fornicar nuestra #curiosidad. Cuando condenamos a los demás, estamos diciendo que #sabemos mejor que ellos cómo vivir sus vidas. Esto es #arrogante y #presuntuoso. En cambio, debemos ser curiosos sobre por qué las personas actúan de la manera en que lo hacen. Cuando somos #curiosos, podemos ver el mundo desde su #perspectiva y ser más comprensivos.
Aquí hay algunas maneras específicas en que podemos poner en práctica estas ideas:
Cuando estemos tentados a juzgar a los demás, podemos tomar un momento para respirar profundamente y calmarnos. Podemos preguntarnos por qué nos sentimos tan enojados o #molestos. Una vez que entendamos la fuente de nuestros sentimientos, podemos #comenzar a ver a la persona desde una perspectiva diferente.
Podemos tratar de comprender las #motivaciones de los demás. ¿Por qué están haciendo lo que están haciendo? ¿Qué están tratando de #lograr? Cuando entendemos las motivaciones de los demás, podemos comenzar a ver sus acciones de una manera más #compasiva.
Podemos #concentrarnos en nuestros propios defectos y áreas de mejora. Cuando nos enfocamos en nuestras propias fallas, estamos menos propensos a juzgar a los demás por las suyas.
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